Hay distanciamientos entre dos personas que no duelen, pues ocurre porque los caminos de cada quien comienzan a ir hacia direcciones opuestas. Sus gustos, pensamientos y formas de vivir comienzan a tener poco en común, y el distanciamiento se da de forma natural.
Creo que es muy común que asociemos el distanciamiento con “dolor”, pero no tiene que ser así. No por que dos personas tomen caminos separados significa que tiene que haber dolor, o que se tienen que dejar de querer, o que tienen que romper su amistad.
Las relaciones, a pesar de funcionar y fortalecerse a través de la comunicación, pueden ser lo suficientemente fuertes como para soportar un distanciamiento.
Piensa en aquella persona que quieres, aunque no encuentres nada en común con él o ella.
Piensa en esa persona que eran tan iguales y ahora son tan diferentes, pero siguen sintiéndose conectadas.
Piensa en esa persona que recuerdas de tu infancia, o tu adolescencia, que a pesar de que esté lejos (no solo en cuanto a
distancia), recuerdas y quieres como lo hacías en esos años.
No dejes que la distancia entre tú y esa persona defina el amor y el cariño que se tienen. Pueden quererse aunque estén lejos, pueden tener una relación a pesar de que sus formas de pensar sean distintas. Te apuesto a que si se dan el tiempo, encontrarán algo que los une.
También existen distanciamientos que sí duelen, que generalmente ocurren a raíz de una pelea, malentendido o falta de comunicación. De un día a otro se rompe una relación entre dos personas que llevaba años de cultivarse.
Haya pasado lo que haya pasado, si es que las dos personas lo desean, este distanciamiento tiene solución.
Recuerda que todas las situaciones tienen dos puntos de vista, y ninguno es más correcto que otro. Si nos tomamos el tiempo de escuchar sin estar a la defensiva y comprender todo lo que la otra persona ha vivido, entenderíamos por qué actúo de esa manera y solo así podemos perdonar.
Sin comprensión no existe el perdón. No dejes que tu ego te gane y rompa esa relación que tanto querías.
Comunica lo que piensas y expresa lo que sientes, pero deja que la otra persona también lo haga.
Hay muchas más razones para perdonar que para no hacerlo.